Este retiro fue inspirado en un tiempo con una organización llamada Esclavitud XXI cuya misión es luchar en contra el tráfico, la trata y la esclavitud humana.
https://www.esclavitudxxi.org/
Fue un privilegio para mí poner guiar a varias personas, hombres y mujeres, que luchan por la libertad. Así que te invito a pasar tiempo con Dios a través de partes de la historia de uno de los grandes libertadores…Moisés.
Hay muchas formas en como los que seguimos a Jesús nos unimos a Él para traer libertad en nuestra sociedad. Mi oración es que podamos seguir despertando a la necesidad de trabajar, orar y unir nuestras voces para poder decir: “Deja a mi pueblo salir para que me adoren” Exodo 7:16
Mi recomendación es que hagas este retiro en un par de mañanas o lo dividas en partes, para poder pasar más tiempo en meditación pues es un retiro más largo.
1. Moisés y la Zarza: Encuentro de Moisés con Dios.
Éxodo 3:4 -6 y 9-10, 11 y 14
Cuando el Señor vio que Moisés se acercaba a mirar, lo llamó desde la zarza:
—¡Moisés, Moisés!
—Aquí me tienes —respondió.
—No te acerques más —le dijo Dios—. Quítate las sandalias, porque estás pisando tierra santa. Yo soy el Dios de tu padre. Soy el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob. Han llegado a mis oídos los gritos desesperados de los israelitas, y he visto también cómo los oprimen los egipcios. Así que disponte a partir. Voy a enviarte al faraón para que saques de Egipto a los israelitas, que son mi pueblo.
Pero Moisés le dijo a Dios:
—¿Y quién soy yo para presentarme ante el faraón y sacar de Egipto a los israelitas?
—Yo soy el que soy —respondió Dios a Moisés—. Y esto es lo que tienes que decirles a los israelitas: “Yo soy me ha enviado a ustedes”.
- Preséntate delante del Señor …frente a esta zarza ardiente. Pídele que te recuerde alguna palabra o momento especial de Su llamado para tu vida para este trabajo que haces. Puedes imaginar que estás delante de esa zarza.
- Conéctate con Su corazón y da gracias porque Él se compadece del clamor que hacemos y escucha el clamor de las personas todavía .
- La tarea de la liberación de “Egipto” es inmensa…puedes identificarte con estas palabras “¿Y quién soy yo?”
- Habla con Jesús acerca de tu sentido de incapacidad frente a una tarea que solo puedes hacer con Su ayuda.
Escucha de manera personal – Yo soy el que soy- Yo soy me ha enviado
2.1 Encuentro con el Faraón – como representación del enemigo
- Usa la imagen para imaginar que estás frente al Faraón — el enemigo que esclaviza. No tengas miedo, Dios está contigo.
- En tiempos de más vulnerabilidad o en días de batalla: ¿Qué mensajes de desánimo escuchas acerca de ti mismo/a? O acerca de la misión que Dios te ha encomendado? Anota las mentiras o mensajes que vienen a tu mente.
2.2 La Pascua – la sangre de Cristo sobre la puerta de tu corazón. Protección en contra del espíritu de Muerte…de gran oscuridad. Que entre esperanza y vida.
- Usando el momento de la Pascua cuando los israelitas pintaron los postes y el dintel de las puertas de sus casas con sangre – pinta sobre esa lista de mensajes o mentiras pidiendo la sangre de Cristo sobre ellas mientras hablas con Jesús. Habla con Jesús mientras meditas.
- Señor Jesús; ¿qué verdades necesitas recordarme para batallar esas mentiras?
- Toma un tiempo para pedir que el Espíritu Santo renueve tu armadura y traiga nueva esperanza y vida.
3. Lamento y queja de Moisés – Exodo 5:22- 23
- No sé si Moisés pensó que la primera vez que se presentaba ante el Faraón, este dejaría salir a los cautivos. Pero no fue así. Estas son sus palabras de lamento. El lamento es parte de nuestra vida y trabajo en el Reino exterior.
Moisés se volvió al Señor y le dijo:
—¡Ay, Señor! ¿Por qué tratas tan mal a este pueblo? ¿Para esto me enviaste? Desde que me presenté ante el faraón y le hablé en tu nombre, no ha hecho más que maltratar a este pueblo, que es tu pueblo. ¡Y tú no has hecho nada para librarlo!
- Toma unos minutos ahora para escribir unas líneas de tu propio lamento. Cada lamento habla de un anhelo profundo de ver más liberación y restauración. Escribe unas líneas sinceras desde tu corazón y preséntalas a Dios…El te entiende. Tal vez vendrán rostros o historias a tu mente…inclúyelas en tu breve lamento.
4. El paso del Mar Rojo – miedo y amenaza
Exodo 14:10 “El faraón iba acercándose. Cuando los israelitas se fijaron y vieron a los egipcios pisándoles los talones, sintieron mucho miedo y clamaron al Señor.”
- En el trabajo que realizas y con la “falta de luz” en la que trabajas…es muy normal sentirnos temerosos y amedrentados. Aún puedes sentirte abrumado/a preguntándote cómo vas a cruzar el Inmenso Mar. Toma un tiempo para hablar con Jesús de tus miedos o dudas …hazlo frente al Mar.
Exodo 14:13 “—No tengan miedo —les respondió Moisés—. Mantengan sus posiciones, que hoy mismo serán testigos de la salvación que el Señor realizará en favor de ustedes.”
- ¿Qué necesitas dejar atrás o qué “mar interior” necesitas cruzar para mantener tu posición y no retroceder?
5. El maná y las codornices – ¿Qué necesitas de provision de parte de Dios?
- El desierto es cansado, no es solamente luchar contra Egipto sino también el proceso de liberación y perseverancia en el desierto. Podrías preguntarle al Señor qué necesitas para cuidarte y poder seguir adelante
- A nivel físico – ¿Cómo están tus ritmos de descanso y cuidado personal.
- a nivel emocional …¿Habrán temas que necesitas procesar o sanar?
- a nivel espiritual … ¿Estás en un desierto? una transición? algún tema que Jesús te invita a hablar con Él? ¿Qué anhelas en tu relación con Dios?
- Señor, ¿habrá algo que necesitas proveer para mí o para aquellos con quien trabajo?
6. Derrota de los amalecitas – brazos cansados
Exodo 17: 12-13 “Cuando a Moisés se le cansaron los brazos, tomaron una piedra y se la pusieron debajo para que se sentara en ella; luego Aarón y Jur le sostuvieron los brazos, uno el izquierdo y otro el derecho, y así Moisés pudo mantenerlos firmes hasta la puesta del sol. Fue así como Josué derrotó al ejército amalecita a filo de espada.”
- La batalla no se gana solos. Moisés necesitó ayuda y mientras él trataba de levantar su brazos con ayuda de otros, otros como Josué batallaban junto con muchos más…..
- ¿A quién necesitas a tu lado? un amigo, un consejero, a tu equipo, intercesores, a un mentor….pregunta al Espíritu Santo como puedes cuidarte al caminar con otros? Mira si alguien viene a tu mente. Anota lo que venga a tu mente.
7. La tienda de reunión – La tienda de intimidad y dependencia
Exodo 33:7 y 9 “Moisés tomó una tienda de campaña y la armó a cierta distancia fuera del campamento. La llamó «la Tienda de la reunión». Cuando alguien quería consultar al Señor, tenía que salir del campamento e ir a esa Tienda.En cuanto Moisés entraba en ella, la columna de nube descendía y tapaba la entrada, mientras el Señor hablaba con Moisés.”
- Imagina que levantas tu propia tienda de reunion. ¿Cómo se ve? ¿A dónde está puesta? Si quieres, toma tiempo para dibujarla.
- ¿Qué relación anhelas tener al pensar en intimidad y dependencia con Dios?
- ¿Cómo está el estado de tu tienda de reunión actualmente? Toma un tiempo para orar de lo que anhelas y necesitas.
- ¿Hay algo que Jesús desea hacer en tu tienda de reunión? Da gracias a Dios por lo que has recibido en este tiempo.